RUTA DOBLE CASTILLO (ALMONACID - PEÑAS NEGRAS). 12-12-2010

- En este día pre-navideño nos hemos juntado un buen puñado de ciclistas para dar la cara y enfrentarnos a las condiciones climatológicas, un total de 13: Javi, Pedro Durán, Israel, Julián García-Patos, Julián Ventas, Velasco, Rafa, Sigfredo, Felipe, Manolo Onieva, Manolo Fernández, Emilio y parece ser que Andrés, sólo parece. TOTAL: 68 km, 3 h. 44 min., 18,8 km/h de media y 52 km/h de máxima.

- La jornada previa estuvo protagonizada por el debate futbolero de la noche, que si al Atleti le pitan penaltis que no son, que si Forlán ya no rinde, que si los del atleti son los sufridores, bla, bla y bla. También se ha de destacar la visita de Don Óscar que vino a darnos ánimos puesto que él no nos podía acompañar al estar de guardia.

- Nos pusimos en marcha pasados 10 minutos de las 9 horas para coger dirección en primer lugar a Almonacid, destino elegido puesto que no tenemos muchas más opciones debido a que los caminos están muy cargados de agua y barro.

- Al poco rato llegamos a la villa, no sin antes cruzar un pequeño pantano que estaba en el puente del AVE, parecía que nos íbamos a hundir en sus profundidades, alguno cruzó con más miedo que 7 viejassss.

- Ya en el pueblo sólo unos pocos nos animamos a subir hasta la cima del castillo, para así hacer tiempo a que se reagrupara todo el pelotón. Durante la subida se ha de destacar el hecho de que parecía que se habían llevado el castillo puesto que estaba oculto detrás de la niebla ¡¡¡cómo una peli de terrorrrr!!!.

- Bajamos a toooo fuego puesto que nos estaban esperando para hacernos una fotito todos juntos con el fondo de la iglesia para el calendario de la peña. Aquí, nos dejaron Julián Ventas, Sigfredo y Emilio que se fueron a otros menesteres.

- Dirección ya de Mora, el señor Patos nos llevó por un camino muy practicable en el que se hacía un rodaje bastante ligerito, lo que ocasionó que llegaramos en un plis-plas. Cruzamos el pueblo saludando a los autóctonos del lugar y ellos dándonos aplausos y ánimos como si fuéramos famosillos.

- La subida la hicimos cada uno como buenamente pudo, vamos a su ritmillo. Aunque se ha de destacar la presencia de un perrito "lindo" que nos fue entorpeciendo nuestro circular poniéndose en medio y haciéndonos quiebros que casi nos deja de caer al suelo, mientras su dueño el "majo" nos decía que le diéramos una patada, que guapo, ¡que se la dé él!.

- A la cima de nuestro coloso sólo llegamos 7 valientes (uno que yo me sé echó el bofe pero llegó), mientras que dos señores con bigotes se quedaron en la falda haciendo la imaginaria como si se tratara de una pareja de la guardia civil, pero hicieron muy bien su papel evitando que se colapsase la subida y redistribuyeron el tráfico ciclistaaaa, je, je, je, je.

- La vuelta la hicimos por los mismos caminos, ya que no nos queríamos arriesgar a aventurarnos por otro recorrido y encontrarnos con el barro dichoso. Este trayecto lo hicimos a un ritmete muy bueno aunque nos dió tiempo a debatir en el seno del pelotón nuestros papeles como padres y arreglar un poco esta sociedad y la futura de nuestros hijossss.

- Llegamos a Burguillos City sobre las 13:00 horas con el deber bien cumplido y con ganas de tomarnos unas cañitas donde Anselmo.

- Un saludito y a cuidarse.