-CRÓNICA DE LA RUTA-
- "En enero no te apartes del brasero", pues eso, como estamos ya a finales del primer mes del año nos encontramos con bastante frío, con mucha niebla y por lo tanto humedad en el ambiente que te calaba, pero aún así fuimos bastantes los valientes que nos juntamos para dar pedales, así como 19, por un lado: Javi, Wenceslao, Israel, Roberto, Jesús Regidor, Manolo Onieva, Manolo Fdez., Emilio Júnior, Lobo, Antonio, Álvaro, Andrés, Camacho y Pedro Durán, y por otro el grupete globerín: Sigfredo, Julián Presi, Felipe, Juan Carlos y Emilio.
- Los acontecimientos previos a la jornada de hoy, estuvieron protagonizados por los retornos de Roberto (después de su lesión) y Jesús Regidor, que ya llevaban un tiempo sin venir. Dimos un repaso a qué ruta realizar hoy, que a este sitio, que si al otro, pero que al final a pesar de los bastantes kilómetros que se nos ponían por delante, no nos achicamos y nos decidimos por poner otra banderita nueva en el mapa y arrancarnos por Huertas, total naaaaa, vaya "SOBO" que nos dimos.
- Salimos sobre las 9:10 horas en dirección a los "adueña sierras", con bastante barrillo en el camino a consecuencia de la niebla reinante, parecía que íbamos en un camino de chocolate. Por estos lares, fuimos todo el grupete juntito, así hasta pasar la finca de Montalbanejos, donde ya nos dividimos en dos grupos.
- Pasamos por los dos arroyos lindos, que nos hicieron pasar un rato divertido, ¿a ver quién era el primero en pasar?, nos calamos hasta las tranchas, bajaba mucha agua de las lluvias de estos días, y esto nos hizo ir con los pies calados ya casi toda la jornada.
- Poco a poco fueron pasando los kilómetros y así llegamos, por caminos conocidos, a Villasequilla dando una vuelta por la zona para dejarnos ver. Desde aquí hasta Huertas marcaba en un cartel 9 km., haciendo un par de ellos, más o menos, por carretera, para poco después hacer un giro a la izquierda y aventurarnos por lo desconocido. Así llegamos hasta un rampón de narices donde tuvimos que dar el DO de pecho para treparlo, aquí se le averió la burra a Don Onieva y se tuvo que parar un ratín para intentar resolver el problema.
- Por fin llegamos a Huertas, nuestro objetivo marcado para hoy. Llegamos a la plaza de la iglesia de San Nicolás de Bari, por cierto muy bonita, antigua y con un artesonado de madera en sus techos muy muy logrado. Nos tomamos la golosina, nos hicimos la fotito para inmortalizar el momento y más pronto que tarde otra vez estábamos dando pedales, puesto que eran ya las 12 y teníamos que volver.
- Salimos del pueblo por unos caminos que picaban para abajo, por lo que rodamos a un ritmo muy vivo para intentar quitarnos los kilómetros rapiditos. Esto nos cundió hasta que nos encontramos un tramo de arena, lo que nos hizo desgastarnos bastante, fueron por lo menos 2-3 kms. Así hasta llegar a Villamuelas (fijaros qué de pueblos hemos visitado), pasamos por el pantano de esta localidad, para al rato afrontar la subida que hay después de la presa hasta llegar a Almonacid.
- Esta subida hizo pero que mucho-mucho daño al personal, cada uno lo fue afrontando como buenamente pudo, sufriendo bastante (unos más que otros) pero ya con las fuerzas flaqueando por la acumulación de kms en las costillas. Así hasta llegar a Almonacid, donde repusimos agüita fresquita, a pesar del cartel de agua no potable, pero nos dijeron los lugareños que este agua es más natural que un tomate, palabras textuales.
- Llegamos a Burguis ya pasadas las 14:30 horas, y muchos con prisas para llegar a casa para que nos se enfadaran las "jefas".
- Un saludito y a cuidarse.