-CRÓNICA DE LA RUTA-
- Pues sí, unos cuantos representantes del ciclismo burguillano (Wenceslao, Óscar, Israel, Manolo Onieva, Pedro Durán y Javi) decidimos ir a representar nuestra pequeña patria al pueblo Gálvez City, con el siguiente itinerario: 73'58 km, 20'9 km/h de media, 55'4 km/h de máxima y 3h 28 min.
- Después de apuntarnos en el ayuntamiento, tomamos la decisión de salir con ropa de invierno puesto que hacía un frío de aúúúúpa. La salida se hizo a las 9'10 h., para empezar a llanear primero por los barrios de la localidad para luego ya salir por los caminos, pasando los kilómetros a un ritmito muy tranquilo, lo que dió lugar al intercambio de anécdotas con todos los compañeros bikers que coincidimos en la jornada.
- A los 35 km más o menos de la marcha se hizo el primer avituallamiento. Tomamos platanito, acuarius y demás golosinas para reponer y sobretodo para prepararnos para lo más duro de la ruta que aún estaba por llegar en la cima del Valdihuelo. No veas el miedo que nos metían, que si te tienes que bajar de la bici para subirlo, que está muy malo por las piedras, que si cuidadín con la bajada... Bueno pues sí, todo fue cierto y se cumplió.
- Los 45 km restantes eran libres para que pudiésemos descargar toda nuestra adrenalina acumulada. Cuando dieron la salida a este tramo, esta vez estuvimos "cucos" porque lo iniciamos en la zona de cabeza (la experiencia) y salimos con el grupo de delante a galope-a toooo pastilla-a fuego-etc.
- Ya en la subida de Valdihuelo se puedo comprobar que era verdad la gran dureza, con tramos de gran pendiente donde casi todo el mundo echó pie a tierra. Su discurrir se hizo por una zona muy chula y donde cada uno pudo salvarlo como buenamente pudo poniendo a prueba nuestro nivel de fuerzas.
- Lo negativo de la jornada, para mí, fue una pequeña caída de lo más tonta (Ay mi espalda) y que luego en un cruce me despisté y me fui por otro sitio, haciendo 5 km más de la cuenta.
- Pero lo más complicado del día estaba esperándonos al final, no por la dureza del recorrido, sino por el dichoso fuerte viento que nos encontramos en contra hasta llegar a la meta que estaba en el pueblo: se nos hizo eterno.
- En general, se puede decir que se trata de una ruta muy entretenida, ideal para poner a tono nuestras fuerzas.
- Un saludito y a cuidarse.